lunes, 26 de enero de 2009

Larguísimo

Ahora que estoy terminando mis dulces días en la playa de río, me doy un tiempo para escribir entre llanto y llanto por el regreso. Es indudable que las horas transcurridas en la arena, matizadas por las zambullidas fluviales, sirven para pensar en idioteces. Mas no se trata de imbecilidades sin sentido, sino aquellas que nos provocan un profundo placer y nos conectan con lo peor, lo más berreta, lo más superficial, lo más tonto e inconfesable que tenemos.
En esas jornadas de sol, sólo cabe recordar lo bueno que, al final, era el programa Zap (con Marcelo Polino, Guido Süller, El Larva y Jacobo Winograd), lo importante que sería conseguir los cuatro capítulos de Contrafuego (protagonizados por Baby Etchecopar) y, por último, lo sugerentes que eran las letras de Samanta y Natalia que, con sus pecheras magras y sus pantalones blancos oxford, bailaban extraordinariamente mal al son de "Quién me la puso, quién me la puso, es lo que quiero saber" —haciendo alusión, por si alguno nació hace 2 años y ya sabe leer, a la droga que se materializó en un jarrón durante una fiestonga en la casa de Guillermo Coppola.
En el marco de este interesante ejercicio intelectual, compré la revista Semanario y descubrí que, por más que lleguen los mp5, las adolescentes se brinden con generosidad por un tequila, Nazarena Vélez haya dejado de tomar droga regalada y Ricky Maravilla no pueda entrar a los eventos top de la costa, mientras siga habiendo una sección para que los Privados de Libertad encuentren pareja, el mundo tendrá un respiro y un remanso.

En la oscuridad del espacio mudo, percibo tu llamada, como una estrella emitiendo quién sabe desde dónde y desde cuándo un mensaje. El silencio de mi alma se estremece, el mundo desolado se llena de señales. Dulzura de poemas soñados en frías mañanas y noches. Hermosa pasión de libertad, obcecada esperanza. Soy Carlos Fabián Corbo, tengo 37 años, (...) estoy por recibirme de abogado, llevo mucho tiempo del otro lado del sol.

Pero si la rehabilitación pos delincuencia no es lo suyo, nada mejor que la beneficencia realizada sin mirar a quién —porque ésa sería la única forma de invertir en esta propuesta.

A Dios se le pide gratis... y si no te dio, ni te da, suerte en la pareja, en el amor, la familia, salud, casa, trabajo y no te quita las trabas, etc., es porque la Justicia Divina decidió que la ayuda que precisás debe ser profesional y paga. ¡ACÁ NOSOTROS NO FALLAMOS JAMÁS!
Dr. Jesús Lalli y Dra. Guadalupe Stirnemann
Atención telefónica de 9 a 20 hs. No cabinas, ni "Por cobrar" a celulares.

Finalmente, el amor desinteresado se hace presente, con personas que dan todo de sí esperando lo mismo (o más) a cambio.

Caballero de 51 años, buena presencia, sin compromisos, vivo solo en Rosario, trabajo por mi cuenta. Deseo conocer a una mujer amable, cariñosa, que busque la felicidad al lado de un hombre. Puede ser mayor y que no tenga a quién dejarle la pensión. Llamame.

El verano, a pesar de los 78° C a la sombra, trae estas delicias. Disfrutemos y agradezcamos sin cesar.

2 comentarios:

Poly Bernatene dijo...

Espectacular tus hallazgos Lau!!!Más insolada que nunca!
Lo que me pierdo por no leer nada de estas cosas, hace un rato le dejé un comentario a Lucho sobre el tema del descanso, deseandoles el mejor de los descansos a uds. y sus historias.También le decía que tampoco se tome demasiado tiempo con las historias porque sino peligra el equilibrio del mundo, veo que sos vos la que sostiene el equilibrio, del mundo... y de Lucho!!
Te mando un beso enorme y que lo terminen lindo!!

Librepensador dijo...

Como siempre, su relato es una maravilla.
Permitame agregarle un personaje mas de ZAP, el inolvidable MICH (buscalo en youtube no tiene desperdicio)
Bady en Contrafuego es el Kiefer Sutherland del sub sub sub desarrollo.
Saludos, me voy de raje a comprar "semanario"