jueves, 9 de agosto de 2012

Pávlov

Hace unos días, un padre futbolero me siguió tres veredas al grito de "¿cuánto tiene tu pibe?", para ver si podía hacerse "amigo" de su nene, otro bebé que saltaba al compás del trote paterno. Este buen hombre se vio intensamente confundido al saber que se trataba de una niña, y me contestó: "ah, pero entonces, claro, yo creí que era un varón por la manta celeste", aludiendo al abrigo que ese día llevaba Malena. Por supuesto, el tema de la amistad dejó de interesarle en ese mismo instante y sólo se encargó de la equivocación que yo le estaba llevando al mundo. Algo parecido nos pasó ayer, cuando mi hija portaba un hermoso gorro turquesa que una señora decodificó como perteneciente, de manera inequívoca, a un varón. En ese momento descubrí el desperdicio de haber asociado el color celeste y sus derivados al sintagma "es un varón", porque parece ser el único elemento del código social y urbano al que todas las personas hacen caso sin dudar, sin tergiversar, y sin ninguna demora, tal vez como un homenaje a los años dorados del conductismo. Si hubiéramos sido medio vivos, el celeste y sus derivados podrían haber asumido los siguientes sentidos:

Celeste y sus derivados = saquen la basura el día en que pasa el camión recolector, y en el horario indicado.
Celeste y sus derivados = lleven una maldita bolsa de nylon para la caca de sus perros.
Celeste y sus derivados = si quieren hacer una protesta en serio y provocar un gasto a sus jefes, levanten los molinetes y no suspendan el servicio de subtes, manga de siomes.
Celeste y sus derivados = por una vez, no voten a zombies y refritos de la derecha, ¿quieren?

De manera evidente, por asignarle un significado bobo y machista como "ah, debe ser varón", hemos perdido una oportunidad de transformación potente y duradera basada en el código cromático. Si seremos lentos.

4 comentarios:

José A. García dijo...

Gente siome hay en todas partes, pero eso de andar buscándole amigos al hijo...

Es deprimente.

Saludos

J.

Anónimo dijo...

Lo del subte: abrir los molinetes acarrea a los trabajadores la posibilidad de causas judiciales (se toma como una estafa a la empresa); hacer paro está protegido por ley. Serían muy siomes si no tuvieran esto en cuenta, no? Saludos.

Verónica dijo...

Es como esa costumbre de las madres de ponerle caravanas a las nenas para que "no las vayan a confundir" Me hiciste acordar a este video que anda circulando por internet. Te lod ejo y te estoy leyendo.
http://www.youtube.com/watch?v=VLuwUY4Y2uo

Laura Rossi dijo...

primera vez que paso por acá. muy buen post :)