Cuando encuentro una chica hermosa y le ruego: "Sé buena; ven conmigo", y ella sigue de largo, muda, con eso quiere decir:
"No eres ningún duque de apellido rimbombante, ni un fornido americano con porte indio, con ojos de equilibrada tranquilidad, con una piel masajeada por el aire de las praderas y por los ríos que las atraviesan; no has visitado ni navegado los grandes mares, que yo no sé dónde quedan. Entonces, vamos a ver; ¿por qué yo, una chica hermosa, tengo que ir contigo?".
"Olvidas que ningún automóvil te pasea balanceándose en largas acometidas por las calles; no veo ceñidos en sus vestiduras, a los caballeros de tu séquito, que, en perfecto semicírculo, van detrás de ti murmurándote bendiciones; tus pechos han sido puestos en orden dentro del corpiño, pero tus muslos y caderas se desquitan de aquella continencia; usas un vestido de tafetán plisado, como los que tanto nos gustaron el último otoño, y no obstante sonríes —¡y ese peligro mortal en el cuerpo!— de tanto en tanto".
"Sí. Los dos tenemos razón; y para no darnos cuenta irrevocable de eso, mejor... ¿no te parece?... cada uno se va solo a casa".
A pesar de que me despabilaría a patadas en regiones recónditas de mi cuerpo con sólo mencionar la idea, creo que el maravilloso Kafka sería un gran blogger.
2 comentarios:
Y sips, claro q sí ....
Alguna vez alguien q conocemos me dijo algo así como que los bloggeros tenemos algo como un "wannabewritters" adentro ....
Me sentí horriblemente identificada con la dama de tetas acomodadas pero de caderas movedizas al mejor estilo "efecto flan". Toda una revelación.
P/D:Por favor, no sean "bloggeros" sean gente que escribe en un blog y ya. Sino me recuerdan irremediablemente a los chicos que cada dos fines de semana se golpean violentamente en el Abasto, y eso si, eso si que me da MUCHO MIEDO.
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