martes, 11 de agosto de 2009

Baches

Mi psicóloga me dijo que era hora de reconocer que era una persona que podía tener errores.
Y puse manos a la obra.
Ahora, casi nada de lo que hago me parece, a simple vista, tan grave; es como si quisiera actuar a cuenta de todas las veces en las que fui hiperexigente con el mundo todo. Así, el problema mutó: no es que quiera parecer perfecta, sino que creo que puedo sacar soluciones de la manga para todas las veces en que decido equivocarme a mucha honra, y me obligo a ello.
Ejercitarme en una supuesta perfección para subsanar la imperfección; pavada de enrosque.

3 comentarios:

Adrimosar dijo...

por lo menos tienes la valentía (y la decencia) de reconocerlo... andamos en las mismas, ejercitando!

La Criatura dijo...

no, estas equivocada

MaGui (Sí, sí... la misma) dijo...

Me tapó mucho mucho el agua: Tuve que leer el post unas 5 veces para entenderlo. Estoy cada día mas boluda... Por favor te pido, que mi proceso de estupidización y el tuyo de complejización no nos arrastre a hablar sin entendernos, amiga! jajaja